Billy McFarland, el hombre detrás del mayor fraude musical de la historia vuelve con otro festival: será en Honduras.

Billy McFarland, el polémico empresario detrás del escándalo del Fyre Festival, vuelve a los titulares con un nuevo proyecto: PHNX 2025, un festival musical que promete lujo extremo y experiencias exclusivas en una isla privada frente a Utila, Honduras.

El evento está programado del 4 al 8 de diciembre de 2025 en Diamond Cay, un pequeño cayo a pocos minutos de la costa de Utila. La propuesta incluye entradas desde apenas cuatro dólares por acceso en línea hasta el paquete “HELIOPOLIS” de medio millón de dólares, que ofrece vuelo privado desde Miami, villa de lujo, chef personal, vehículo con guía, barco disponible las 24 horas y cena con el propio McFarland. En el escenario principal se presentará French Montana como artista principal.

Entre la ambición y la polémica

La noticia ha generado entusiasmo entre algunos fanáticos del entretenimiento exclusivo, pero también escepticismo entre quienes recuerdan el fiasco del Fyre Festival, que terminó en caos, demandas y una condena de prisión para McFarland. Su regreso al mundo de los eventos internacionales despierta preguntas inevitables: ¿aprendió de sus errores o se repite la historia?

Las dudas no solo giran en torno al organizador. Diamond Cay es una isla diminuta con recursos limitados. Aunque el evento promete una experiencia privada para solo 400 personas, los desafíos logísticos son evidentes: transporte marítimo, abastecimiento de agua, energía y servicios sanitarios suficientes para cientos de visitantes en un entorno frágil.

Para Honduras, la llegada de un evento con proyección internacional podría suponer visibilidad turística y oportunidades económicas para los negocios de Utila y alrededores. Sin embargo, también existe preocupación por el impacto ambiental, la capacidad de respuesta ante emergencias y la posible afectación del arrecife coralino que rodea la zona.

La Municipalidad de Utila y los residentes se encuentran a la expectativa. Muchos ven en este festival un experimento que pondrá a prueba la capacidad del país para recibir eventos de alto nivel sin comprometer su patrimonio natural. Otros, en cambio, temen que sea una repetición de la historia que ya hizo famoso a McFarland por las razones equivocadas.

PHNX 2025 promete lujo, exclusividad y un “renacimiento” de la experiencia de festival privado. Pero también carga con el peso del pasado de su creador. Para algunos, puede ser la redención definitiva de Billy McFarland; para otros, una bomba de tiempo que pondrá a prueba la reputación del país anfitrión.